Nuestra última escapada autocaravanista del año fue el pasado mes de diciembre. Se celebró el día 21 la carrera Sin Son, 10 km entre Portosín y Porto do Son, así que decidimos desplazarnos la noche anterior a la competición y aprovechar que el tiempo se estaba comportando de lujo, ni frío ni lluvia.
En Porto do Son no hay área ni ningún lugar específico para pernoctar. Cuando llegamos vimos que había más autocaravanas, así que nos instalamos en la misma zona, al final del puerto, en una gran explanada junto al paseo que va bordeando la costa, un sitio llano y tranquilo... Bueno, tuvimos un pequeño incidente a eso de las cuatro de la mañana, cuando una pandilla de graciosillos vino a tirar petardos junto a nuestra autocaravana... En fin, un episodio desagradable pero que podría habernos pasado en cualquier otro sitio.
Con un día de sol, como el que pudimos disfrutar, este pequeño pueblo costero es un destino muy agradable para pasear junto al mar, por un paseo que nos lleva desde el pueblo hasta una zona de playa rocosa, acercarse al puerto pesquero y si hay niños pequeños, llevarlos al parque infantil junto a la playa urbana.
Hay un museo etnográfico llamado Marea, un lugar en el que se recorre la historia de la relación de Porto do Son y sus gentes con el mar y sus oficios.
Paseo Marítimo |
Gastro-recomendación: En la calle que da al puerto encontraremos numerosos restaurantes y tabernas. Os recomiendo dos, la Taberna Chinto para tomaros un pulpo, o una tortilla de patatas, y la Parrillada Jape si os apetece un churrasco o un marisquito fresco del día.
En el centro del pueblo, en la Plaza de España, hay un par de cafés donde sirven buenos desayunos. Estuvimos en el Bar Plaza y nos encantó.
La playa al final del paseo |
Es genial! Nos quedamos varias noches y es el paraíso
ResponderEliminar